Para empezar, como ya es habitual, un repaso de las pelis con más de 3 nominaciones:
NO COUNTRY FOR OLD MEN: 8 nominaciones
THERE WILL BE BLOOD: 8 nominaciones
EXPIACIÓN: 7 nominaciones
MICHAEL CLAYTON: 7 nominaciones
RATATOUILLE: 5 nominaciones
LA ESCAFANDRA Y LA MARIPOSA: 4 nominaciones
JUNO: 4 nominaciones
ENCANTADA: 3 nominaciones
SWEENEY TODD: 3 nominaciones
TRANSFORMERS: 3 nominaciones
EL ULTIMÁTUM DE BOURNE: 3 nominaciones
LA VIE EN ROSE: 3 nominaciones
Si el año pasado hubo grandes sorpresas, saltos, variaciones y batacazos, esta edición ha sido una balsa de aceite. Para ahorrar tiempo con lo de las nominaciones suelo hacer una plantilla con el bloque de favoritos y apenas he tenido que añadir un par de nombres a la lista. La mayor caída la ha vivido sin duda Into the wild, que sólo ha conseguido una única nominación en las 8 categorías principales cuando aspiraba a colar nombres también en dirección, actor, actriz de reparto e, incluso, película (con el nivel que había era muy improbable que entrara en la categoría de guión). Sean Penn no es un tipo que caiga bien en la Academia y esto viene a confirmar que siempre parte en desventaja. Ni las canciones de Eddie Vedder para su banda sonora han conseguido rellenar y se ha quedado sólo con la candidatura de montaje y actor de reparto.
En cuanto a las que sí están, tenemos este año una edición menos diversa de lo que podría presuponerse con tanto estreno interesante con sólo 12 multinominadas. En cabeza numéricamente están las que también son favoritas para llevarse el premio gordo ahora que la Academia les ha dado su beneplácito, No country for old men y There will be blood, que han cumplido con todas las categorías para las que se apostaba. De cerca les siguen Expiación y Michael Clayton que, muy probablemente, y teniendo en cuenta los rivales que tienen, serán las grandes derrotadas en febrero con a lo sumo algún premio artístico-técnico. Por su lado, Juno se convierte en la Little Miss Sunshine de este año, como venía en el guión, aunque sólo parta como favorita para el premio de ídem, y La escafandra y la mariposa sigue los pasos de El laberinto del fauno aunque no haya dado el golpe de autoridad de la mexicana (eso sí, se ha logrado meter en la categoría de dirección). Pero si hay una sorpresa agradable dentro de la lista de nominaciones es Ratatouille, que ha batido todos los records consiguiendo ni más ni menos que 5 nominaciones. Una muestra más del buen hacer técnico de Pixar.
Y ya, como uno de los nombres del día, tenemos a Cate Blanchett, que con sus dos nominaciones de hoy se añade al grupo de pentanominadas antes de los 40 aunque ella, a diferencia de Kate Winslet, ya tenga su estatuilla. También doblemente nominado tenemos a Roger Deakins, el maestro de la fotografía que ha acompañado a los Coen durante todos estos años y que podría llevarse por fin un merecido premio después de 5 nominaciones. Y quedándonos en casa tenemos a nuestro Bardem como favorito para actor secundario y a Alberto Iglesias, que vuelve a meterse en la categoría de banda sonora como principal rival de Dario Marianelli.
Hasta aquí el comentario general de unas nominaciones previsibles, no tan hispanas como las que nos estaban ofreciendo estos años, pero, eso sí, con un primer favorito de actuación. Ahora vamos por apartados:
Mejor película: salvo que Expiación se proponga dar la campanada, sin duda un mano a mano entre No country for old men y There will be blood. Parece que la de los Coen trae más consenso detrás, pero There will be blood viene subiendo. Tal vez le pueda pesar que esté tan claro el premio a Daniel Day-Lewis y los académicos crean que es recompensa suficiente pero, no obstante, sigue siendo aspirante de peso. Que Juno o Michael Clayton ganaran pasaría a los anales de grandes sorpresas de los Oscars.
Mejor director: más igualada está la categoría de dirección. Como realizadores de las películas favoritas, los Coen y Paul Thomas Anderson, cuentan con el apoyo necesario para ser los rivales a batir, pero no hay que perder de vista que Schnabel se llevó el Globo de Oro y viene muy apoyado por los círculos de críticos y el propio sindicato. Sería curioso verlo, pero en absoluto sorprendente. Y algo parecido se puede decir de Tony Gilroy que, aun siendo debutante, se ha ganado el favor del medio y podría saltar entre las aguas revueltas. Pocas posibilidades tiene Jason Reitman, que bastante ha hecho con colarse en la categoría dejando fuera a gente como Sidney Lumet o Tim Burton. Más allá de la nominación será difícil que rasque algo.
Mejor actuación principal masculina: sólo George Clooney podría impedir que Daniel Day-Lewis se llevara de calle el Oscar en la que es la categoría más segura de un año que, con tanto mano a mano, está más igualado que ningún otro. Del resto sólo cabe destacar la no por previsible menos agradable circunstancia de ver a Viggo Mortensen nominado por su ‘killer’ con corazón de Promesas del este y la, en este caso sí, muy sorprendente nominación de Tommy Lee Jones, que ha conseguido que la estupenda En el valle de Elah no se vaya de vacío de esta edición.
Mejor actuación principal femenina: hace unos meses habría puesto la mano en el fuego porque la Blanchett se llevaba este año su segundo Oscar, pero defender una película tan mediocre como la segunda parte de Elizabeth es difícil y hace tiempo que dejó de ser la favorita. Si suena un nombre ahora ese es el de Julie Christie, que con su enorme trabajo en Away from her podría convertirse en la actriz con más tiempo transcurrido entre dos premios. Dejando a un lado las posibilidades que todavía pueda conservar Cate Blanchett, las aspirantes han pasado a ser Ellen Page y Marion Cotillard. Hacer de Edith Piaf tira mucho, y la Page es un monstruo de la escena, probablemente, la actriz joven con más talento del panorama desde que saltara a los titulares Scarlett Johansson. Si este año no se convierte en la actriz más joven en ganarlo, ya veremos que esta no es la última vez que pasa por aquí. Y cómo no destacar a otro de esos grandes mitos que rondan los 40, Laura Linney, que silenciosamente se ha logrado meter en la categoría sin más apoyo que el de los locos de los premios que la veían venir. Seguirá sumando nominaciones sin premio como la Winslet y Julianne Moore, pero aquí está un año más.
Mejor actuación de reparto masculina: nuestra categoría de este año. ¿Quién diría hace unos años que Javier Bardem iba a protagonizar un mano a mano por la lucha de la estatuilla? Sin duda es el favorito de esta edición, pero no le perdamos la cara a Casey Affleck, que como, además, se ha quedado sin nominación principal por su papel en Gone baby gone, podría recibir un apoyo extra. El resto están a larga distancia y, teniendo en cuenta que hablamos de gente como Philip Seymour Hoffman o Tom Wilkinson, ambos ya con Oscar, dice bastante del nivel de las interpretaciones.
Mejor actuación de reparto femenina: una de las categorías peliagudas de este año para las apuestas. Por lo que se ha ido viendo, lo más probable es que sea un nuevo mano a mano de la Blanchett y Amy Ryan como han venido demostrando los premios de la crítica. En cualquier otra circunstancia haber interpretado a Bob Dylan le habría dado otra posibilidad a la Blanchett de llevarse el segundo Oscar, pero Amy Ryan está inmensa en Gone baby gone y partirá como favorita con no mucha diferencia, eso sí. Detrás, y no tan lejos como podría parecer, vienen la maquiavélica Saorsie Ronan de Expiación, una de las revelaciones de la temporada, y Tilda Swinton, una mujer a la que los premios le van teniendo ganas y, si sigue así, algún día logrará llevarse algo. Veremos lo que dice el sindicato de actores al respecto, que son muchos y pueden resolver dudas.
Mejor guión original: ahora que se separan las categorías se le ha vuelto a complicar la cosa a Juno. A la obvia nominación de Michael Clayton se le suma el sector ‘indie’ encabezado por Lars and the real girl y, sobre todo, por The Savages que, teniendo en cuenta que ha metido a la Linney como mejor actriz, se convierte en una seria aspirante. Y no perdamos de vista Ratatouille, cuyo guión ya fue elegido como el mejor del año por algunos críticos. Se lo van a poner difícil a Diablo Cody.
Mejor guión adaptado: la categoría grande de este año. Los guionistas han perdido la cabeza y se han decidido a adaptar a algunos de los autores más importantes de la literatura reciente: Ian McEwan, Alice Munro, Cormac McCarthy, Upton Sinclair… Entre todo este maremágnum es difícil decidir. Como en la categoría de dirección se presta apostar por No country for old men y There will be blood, pero no hay que perder de vista al ya ganador de un Oscar Ron Harwood, que adapta la muy compleja La escafandra y la mariposa. Algo más desequilibrado parece el guión de Expiación y una incógnita el de Away from her, que por su pequeñez no se estaba contando con él y ha metido a una aventurera del riesgo como Sarah Polley en la pugna. Salga lo que salga será difícil no reconocer su acierto.
Del resto de esta edición no queda mucho que comentar más allá de la vergüenza que este año ha dado que con una selección tan enorme de grandes películas, hayan pasado las que hayan pasado en la categoría de lengua no inglesa. Esperemos que Persepolis salve un poco los muebles en la categoría de animación, aunque teniendo en cuenta cómo viene Ratatouille lo va a tener muy difícil. Y ojalá que Alberto Iglesias tenga la oportunidad de sumarse a Bardem en un minifestival español y se lleve un premio a la altura del clasicismo de sus bandas sonoras.
Así que aquí dejamos esto hasta que empiecen a salir los premios de los sindicatos que comenzarán a aclarar la cosa. Y para terminar recomiendo la que puede ser una de las canciones más bonitas que hayan estado nominadas a los Oscars en los últimos años, el Falling Slowly de Once, cantado por Glen Hansard y Markéta Irglová. Si hay justicia en el mundo debería llevarse el premio a casa.
P.D. Nota a los productores: poned pingüinos en vuestras películas. Tendréis la nominación al Oscar asegurada XD .
