ROAD TO THE OSCARS (14.2): Películas preseleccionadas para el Oscar a Mejor Película en Lengua No Inglesa
Continuamos con el segundo bloque de precandidatas extranjeras al Oscar de mejor película en lengua no inglesa:
Italia: Otro nombre grande que suena como candidato final. Tornatore ya sabe lo que es ganar un Oscar porque suya es una de las ganadoras más recordadas por su homenaje al Cine: Cinema Paradiso. Tan importante fue que, curiosamente, La desconocida es sólo la octava película de un director que todo el mundo relacionaría con lo mejor del cine italiano. De hecho, esta nueva propuesta está mucho más cerca de Una pura formalidad que de la entrañable historia de Totó y Alfredo: una mujer inmigrante de pasado oscuro hace todo lo posible para convertirse en la asistenta de una familia que tiene una hija con un problema neurológico, pero su pasado no tardará en encontrarla. Se ha llevado 5 premios de la Academia italiana y el del público europeo. No es mala carta de presentación para un director que hacía más de un lustro que no dirigía.
Japón: Masayuki Suo pasa por ser el director que con más humor se ha tomado la sociedad japonesa y sus tradiciones y gracias a este hecho se ha convertido en uno de los tipos cuyas películas más premios de la Academia japonesa han acaparado. Con Sumo Do, Sumo Don't se hizo con 5 y con el fenómeno social Shall we dance?, que intentó adaptar Hollywood sin ningún éxito, se hizo hasta con 14, un récord todavía no superado. Esta vez viene con I just didn't do it, su primera película "seria", que sigue la tortura burocrática y judicial a la que es sometido un tipo al que se le acusa de acosar a una menor en el tren.
Kazakhstan: Sí, el país de Vinokourov y de Borat trae algo interesante. Y lo trae porque ha sido el país que ha acogido el último proyecto del nómada del cine Sergei Bodrov. Ya su nominada al Oscar El prisionero de las montañas había sido coproducción pero, obviamente, fue a Rusia a la que representó. Mongol también da su visión de estas minorías étnicas dentro de la gran Rusia, pero se va mucho más atrás y apunta mucho más alto ya que es Gengis Khan el objeto de estudio de este drama histórico. De cómo un esclavo luchó por su supervivencia antes de conquistar el mayor imperio que el Hombre haya conocido. Y el que interpreta al gran Khan es ni más ni menos que Tadanobu Asano, protagonista de historias tan grandes como Gohatto, Zatoichi o Last life in universe. Las aplicaciones de la historia, sobre todo con su pasado retratando la causa chechena, se dejan al espectador.
Líbano: Habría sido una apuesta clara con el éxito que tuvo en Cannes, pero después de Toronto ha perdido mucho gas y casi nadie habla ya de Caramel. Es imposible descartarla, porque las historias cotidianas bien contadas tienen un gran potencial de boca a boca y en cualquier momento puede dar el salto (no hace falta recordar Volver y El laberinto del fauno para ver lo que pueden cambiar las cosas), pero vienen apretando por detrás y el estreno en salas ya no es hasta febrero, con lo cual su única salvación es el apoyo explícito de algún premio de los críticos americanos.
Macedonia: Otro mercenario del cine como Bodrov vuelve a meter a Macedonia en la carrera hacia los Oscars. El caso de Manchevski es aún más exagerado que el de Tornatore porque es uno de los nombres respetados del cine cuando antes que esta sólo había rodado película y media (la media es Dust, una historia con dinero de hasta cuatro nacionalidades que rodó para salir del paso). El motivo es que esa una fue Before the rain, espectacular recreación de las consecuencias de la violencia en pleno fragor de la guerra de los Balcanes que tuvo a mal cruzarse con Mikhalkov en los Oscars (también este año vuelven a reencontrarse). Shadows, muy al estilo de la literatura eslava, cuenta la historia de un hombre que lucha por alejarse de la sombra de su padre, un médico de gran reputación.
México: Ya lo comentábamos con Hungría y es que, echando el resto también, México se la juega con su autor más iconoclasta y polémico, Carlos Reygadas. Aunque es de largo lo más accesible que ha rodado, sólo por el argumento pinta como una historia de las de Dreyer pero con carne: la fe de un 'amish' que vive en una comunidad perdida en el norte de México es puesta a prueba cuando se enamora de otra mujer. Sería milagroso que un tipo con películas como Batalla en el cielo y Japón llegase a estar nominado, pero todo puede ser en este mundo.
Noruega: Y ya que hablábamos de cruzarse con malos compañeros de camino a los Oscars, Næss se lleva la palma. No sólo se tuvo que enfrentar con Amélie, monstruo lo suficientemente temible, sino que hubo que sumar El hijo de la novia, Lagaan y, por supuesto, la que se lo acabaría llevando sorpresivamente, En tierra de nadie. Así, una historia genial y muy oscarizable como era Elling se quedó compuesta y sin premio. Este año los monstruos parecen menos fieros y con una historia muy similar podría hacerse, al menos, con el mismo lugar de privilegio entre las 5 finalistas.
Polonia: Y si de grandes nombres hablábamos qué decir de ese mito nacional que es Andrzej Wajda, que por tener tiene hasta el Oscar honorífico y es responsable de buena parte de las nominaciones de su país. Después de su último éxito, Pan Tadeusz, retorna con una historia de las suyas, de la II Guerra Mundial en Polonia y la matanza de Katyn. Cine de ese que ya no se hace.
Portugal: Subimos el listón tanto por mito como por edad para irnos con el decano del cine, Manoel de Oliveira, que a sus casi 100 años se atreve a darle continuidad a Belle de jour. No está la Deneuve, pero vuelve Michel Piccoli a perseguir a su Séverine para vengarse. El Oscar no se lo llevará, pero ahí está dando el tipo con apuestas que asustarían a muchos más jóvenes.
República Checa: Y en la línea de Wajda nos vamos con otro mito del cine de la Europa del este que pasará a la historia por adaptar la muy grande Trenes rigurosamente vigilados que le valió el Oscar: Jirí Menzel. Esta vez vuelve a llevar a la pantalla una novela de su colega Bohumil Hrabal para, en el mismo estilo dramático-cómico, relatar las vivencias de un hotel en la Praga de la primera mitad del siglo XX.
Rumanía: Aquí está la otra gran favorita. Apisonadora del cine europeo, 4 meses, 3 semanas y 2 días ganó la Palma de Oro y el FIPRESCI a mejor película en Cannes, los premios de mejor película y director en los EFA y la crítica la ha elegido mejor película del año. En EE.UU. ya ha empezado por una nominación de los Satellite y de la NBR y seguro que no tarda en caer la de los Globos de Oro, sin contar con el premio a la mejor película internacional en el festival de Hollywood. Persepolis parece la más atractiva, pero puede pesarle la nominación de animación y que haya reparto salomónico.
Rusia: Y, como decíamos, Mikhalkov también vuelve, esta vez con una revisión del clásico Doce hombres sin piedad. Cuando se estrenó en Venecia no gustó mucho que con eso de la edad se haya puesto maniqueo y haga demagogia con el tema checheno. Pero como los americanos en eso son más simples que el asa de un cubo, no se puede decir que no tenga posibilidades y de hecho páginas como InContention la incluyen en sus listas.
Suecia: País de los de gran tradición, viene este año con un nuevo "cachorro" de la Svenska Filminstitutet que acogiera a Bergman, Roy Andersson -lo de cachorro es un decir, porque Andersson ya arrasó en Berlín hace 40 años con En Kärlekshistoria-. Es difícil saber de qué va su última película que, básicamente, describen como viñetas rodadas con cámara fija. La cosa es que en Cannes la gente salió entusiasmada y el tipo se llevó una nominación a mejor director en los EFA. Así que algo tendrá el agua cuando la bendicen.
Taiwan: La otra más destacable por los que no están que por los que están. La candidata oficial iba a ser, cómo no, la nueva de Ang Lee, Lust, caution, pero la Academia aprovechó el lío de la israelí para dejarla fuera también. El motivo oficial fue que había demasiada gente anglo-parlante en el equipo, una excusa barata para camuflar el motivo real, y es que le han cascado un "sólo para mayores de 18 años" por las imágenes sexuales. Colar una película de Ang Lee con el tirón que tiene, arriesgándose a que pase entre las 5 finalistas, sería desde el punto de vista conservador casi como promocionar el sexo explícito. Así que Lee se queda fuera y le sustituye el debut del director de fotografía de Hou Hsiao-hsien, que dicen que no está mal, pero es que a estas alturas hay poco que esté mal.
Uruguay: Para completar la presencia latina interesante acabamos con Uruguay, curiosamente con un tipo que ya estuvo nominado al Oscar por la dirección de fotografía de Ciudad de Dios, César Charlone. Junto con Enrique Fernández presenta El baño del Papa, que gustara bastante en Cannes y que se consiguió hacer eco suficiente en el festival de Toronto como para llegar con posibilidades reales.
Así que aquí acabamos el mondongo. A día de hoy mis apuestas totalmente sacadas de la manga serían:
• "El Año Que Mis Padres Se Fueron de Vacaciones"
• "La Desconocida"
• "Los Falsificadores"
• "4 Meses, 3 Semanas y 2 Días"
• "Persepolis"
Seguro que las hay mejores, pero como esto va por pálpitos, ahora mismo la cosa la dejo así. Me gustaría meter alguna oriental, pero me parece poco probable que entren. Eso sí, como consideración final no hay que olvidar que, desde el año pasado y una vez elegidas las 5 finalistas, para votar a mejor película en lengua no inglesa es obligatorio verlas todas. Esta medida impide eso tan típico de votar de oído y permite sorpresas tan agradables como que La vida de los otros se llevase su premio respectivo en detrimento de la favorita El laberinto del fauno. Estando la cosa así, la situación favorece a 4 meses, 3 semanas y 2 días, que no es una película tan vendible a 'a priori' como Persepolis, pero cuando llegue el momento y en enero se anuncien las nominaciones definitivas ya echaremos cuentas. Mientras tanto, como dice Sasha Stone, "nadie sabe nada".
3 comentarios:
muy buen blog, Excelente blog podría decir
hahaha...
te tenía tan olvidado
HAs visto a la representante de Iran ?
es increíble
Saludos, y feliz Navida!!
Se agradecen los cumplidos ;-) .
Pues sí, Irán siempre suele tener representación interesante, pero le pasa lo que a los coreanos, que luego no se comen un rosco. Si no me falla el dato sólo han conseguido una nominación y fue con Los niños del paraíso, de Majid Majidi. Ni Kiarostami, ni Panahi, ni ningún Makhmalbaf se han hecho un hueco, lo que dice mucho de sus dificultades para llegar a EE.UU. Y con el percal que hay este año me extraña que tenga oportunidad. Ni yo la he incluido en mi lista de 30, así que lo tendrá complicado.
¡Rebienvenido y feliz Navidad a ti también!
Muy buena selecciòn ha salid d etu manga.
Y a falta de Lust Caution, coincido plenamente contigo.
De todo corazòn. Mil Felicidades esta Navidad.
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